El pabellón criollo se considera el plato nacional de Venezuela y un símbolo de su identidad culinaria. Combina cuatro elementos sencillos pero sabrosos: arroz blanco, frijoles negros guisados, carne deshebrada y plátanos fritos. Estos ingredientes representan la diversidad cultural y agrícola del país: el arroz y los frijoles aportan una base nutritiva, la carne aporta fuerza y los plátanos aportan un toque tropical dulce. Cada región de Venezuela le aporta su toque único, pero la esencia del plato se mantiene: una comida completa y generosa. El pabellón criollo es naturalmente libre de gluten, ya que utiliza productos sin harina ni pan. Se sirve en comidas familiares y en fiestas patrias, y sigue siendo un clásico en los hogares venezolanos.
Asa la carne unos minutos por cada lado, luego ponla en una olla grande con agua y sal y cocínala de 1.5 a 2 horas hasta que esté tierna. Escurre la carne, reserva un poco del caldo y desmenúzala con un tenedor. En una sartén, sofríe la cebolla, el ajo y el pimiento morrón en un poco de aceite. Agrega los tomates, el pimentón, el comino, la sal y la pimienta. Incorpora la carne desmenuzada y un poco de caldo para espesar la salsa. Cocina a fuego lento durante 10 minutos.
Escurre y enjuaga los frijoles que remojaste el día anterior. Cocínalos en una olla grande con agua y laurel durante aproximadamente una hora, o según las instrucciones del paquete. En otra sartén, sofríe la cebolla, el pimiento, el ajo y el comino. Agrega un cucharón de frijoles y tritúralos ligeramente; luego, devuélvelo todo a la olla para espesar la mezcla. Agrega sal al final de la cocción y mantén caliente.