Después del delicioso pastel salado de boniato y calabacín , llega la temporada, así que aquí les presento la versión con calabaza. Tiene una textura húmeda y un sabor suave. Este pastel es perfecto para acompañar una ensalada, para un picnic o como aperitivo. La receta utiliza una mezcla de harina sin gluten, pero puedes sustituir la harina de trigo sarraceno y garbanzo por harina de arroz o simplemente usar una mezcla de harina sin gluten ya preparada (no necesitarás añadir almidón, ya que estas mezclas ya lo contienen). Con unas pocas especias, chorizo para realzar el sabor de la calabaza y queso para una textura cremosa, tendrás un pastel salado perfecto. El pastel es fácil de preparar y se conserva bien en el refrigerador. Es apto para personas con sensibilidad al gluten y ofrece una forma diferente de disfrutar de la calabaza y el boniato. El resultado es un pastel que mantiene su forma al cortarlo, es muy húmedo y se conserva fácilmente. Es ideal para comidas rápidas, aperitivos, picnics o para llevar en la lonchera. La receta se puede adaptar a diferentes tipos de harina según lo que tengas a mano. El resultado es un pastel fácil de digerir, con buena textura y nutritivo, sin aditivos innecesarios. Fue todo un éxito en nuestra última reunión.